La seda es una de las fibras naturales más sorprendentes del mundo. Y aunque todos conocemos sus usos en la moda y en la elaboración de nuestros suaves y exclusivos pañuelos de seda, ¿sabías que este hilo fabricado de forma natural por los gusanos de seda se emplea también en otros campos como la medicina y la farmacología?
Usos de la seda en medicina
Como decíamos, las propiedades de la seda no solo son aprovechadas por la industria de la moda, quien nos permite disfrutar de prendas de alta costura únicas y de una calidad excepcional, como los pañuelos y fulares de seda, las batas, la ropa interior o los vestidos de seda.
Estos hilos suaves, resistentes, absorbentes y flexibles se utilizan por sus excelentes propiedades en aplicaciones en la reparación de tejidos y en farmacología.
Aunque esto no es nada nuevo. Los hilos de seda de los gusanos de seda se utilizan desde hace décadas a modo de biomaterial para suturar heridas. Por ejemplo, hace un siglo se observaron sus ventajas frente al catgut, al ser más biocompatible y provocar menos infecciones.
Aunque existen indicios del uso del hilo de seda en épocas anteriores. Trotula, ginecóloga de Salerno, comenta la utilización de suturas con hilo de seda en intervenciones del perineo en su libro Cura de las enfermedades de la mujer, antes, durante, y después del parto, publicado alrededor de 1050.
Hilo de seda para suturas
A día de hoy, los bio-ingenieros diseñan enzimas y semiconductores en las fibras de esta proteína natural que hilan los gusanos de seda. Las finas hebras que fabrican estos gusanos se someten a procesos térmicos, modificadas por tensado o por tratamientos químicos en medio de ácido y otras formas, con el propósito de crear materiales nuevos con propiedades más que notables.
El hilo de seda también se utiliza en cirugía para las suturas, especialmente por su resistencia y compatibilidad con los tejidos humanos, ya que el sistema inmunitario no los rechaza.
Gracias a esta biocompatibilidad se están diseñando también interesantes sensores. Se están confeccionando materiales electrónicos y fotónicos modelando metales o finas películas sobre superficies de seda.
Se cree que en un futuro estas películas podrían emplearse para tratar lesiones epilépticas o de la médula espinal. También se prevé que los sensores implantados permitan la supervisión electrónica de nutrientes, dosis de fármacos, contenidos celulares en sangre y otros tejidos.
Otro campo que se está trabajando es el de la genética. En 2010 se consiguió modificar gusanos de seda genéticamente para producir seda de araña. Con la mayor resistencia a la tracción de estas fibras, se podría aplicar la seda para la obtención de tendones artificiales o chalecos antibalas.
En un futuro no lejano, los hilos de seda tendrán también un gran protagonismo en los implantes de tejidos y órganos.
Cualidades médicas de la seda
El hilo de seda está constituido por proteínas, que le dan unas propiedades mecánicas excepcionales. Su gran resistencia y deformabilidad le permiten absorber una enorme cantidad de energía antes de romperse.
Por todo esto, la seda constituye un biomaterial resistente y biodegradable perfecto para usarlo en la ingeniería de tejidos. Entre otras cosas, los usos de la seda en medicina:
- Facilitan la adhesión de las células
- Estimulan su crecimiento y permite la diferenciación.
Este polímero natural, de base proteínica, presenta una asombrosa combinación de resistencia y deformidad que supera con creces las prestaciones mecánicas de las fibras artificiales.
Las hebras de los hilos de seda constan de dos filamentos de fibroína (proteína fibrosa rica en alanina y glicina), recubiertos por una capa de sericina (proteína amorfa rica en serina).
Conclusión
Como creadores de pañuelos de seda nos entusiasma conocer un poco más sobre la fibra natural con la que elaboramos nuestros coloridos pañuelos y fulares de seda, que por cierto, también cuentan con interesantes particularidades y propiedades, que ya os contamos en este otro post sobre las diferencias entre la seda natural y sintética.